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Elsie Monge en la sala de su departamento en Quito. Marzo de 2022. Foto: Karen Toro A.
| Daría #LaMaracx

Power Alley

Lillah Halla, Brasil, Francia y Uruguay, 2023, 99′, ficción.

En Brasil, el aborto sigue criminalizado y las mujeres, hombres trans y personas no binarias pueden ser encarceladas entre 1 y 3 años por practicárselo. Así lo sabe Sofía (personaje interpretado por Ayomi Domenica Dias), la protagonista de la película Power Alley, cuando a los 17 años descubre que está embarazada y se niega a cumplir el mandato de la maternidad.

En medio de un entorno deportivo, juvenil y clasemediero, la joven voleibolista se halla en un punto crucial de su vida, pues su entrenadora y una reclutadora de talentos están evaluando su desempeño en la cancha con miras a otorgarle una beca universitaria. Sofía deberá enfrentarse a las expectativas de su padre, a los deseos de victoria de sus compañeras de equipo y a la persecución de una fanática religiosa que no escatimará esfuerzos para evitar que aborte.

Con un estética instagrameable de @joven_feminista_occidental y la ausencia de una perspectiva de clases aterrizada en un Brasil dónde el 30% de la población ha sido empobrecida y la favela es el gran organizador de la vida, la directora Lillah Halla nos ofrece un conjunto de escenas de sexualidad lésbica muy bien logradas dónde los cuerpos se derraman entre pieles negras, pardas y blancas para dar cuenta del afecto, los cuidados y la lluvia de deseos contraheterosexuales entre Sofía y sus amigas.

Destaco de esta propuesta fílmica —que discurre entre el drama y la comedia— el retrato de las prácticas más comunes de quienes integran los espacios religiosos fundamentalistas: su ridícula obsesión por los fetos y sus esfuerzos por perseguir a las mujeres que desean abortar. Retrato que incomodó al mismísimo expresidente brasileño Jair Bolsonaro —abierto opositor al aborto—, quien se sumó a una ola de presiones para cancelar el financiamiento inicial de la película. Pese a ello, ésta se estrenó el 23 de septiembre en el Festival de Cannes 2023, donde resultó ganadora del Premio de la Federación Internacional de la Prensa Cinematográfica – FIPRESCI de Secciones Paralelas y estuvo en contienda por la Palma Queer.

Por otra parte, es de suma importancia recordar que fue gracias a las mujeres negras, las redes de acompañamiento y al movimiento feminista en Brasil que al día de hoy en América Latina y El Caribe se cuenta con un protocolo testeado y seguro parar practicarse de manera autónoma un aborto con medicamentos. Y esto queda claramente plasmado en una brevísima y traviesa secuencia donde se lee sobre un muro el grafiti: «3 pastillas de misoprostol de 300 microgramos cada 3 horas». 😉

En un mundo de maternidades forzadas y hasta “elegidas”, en un contexto de exacerbación de la violencia sexual y en medio de un paisaje donde domina la alianza entre los estados penales y el crimen organizado, es de vital importancia recordar que el aborto nunca tuvo que ver con la «defensa moral de la vida», siempre, siempre, con la gestión política de los cuerpos que pueden parir y abortar.

Si deseas ver “Power Alley” en Quito, no te pierdas su segunda y última función en el #FestivalEQUIS2023 el próximo viernes 17 de noviembre a las 17h00, en la Cinemateca de la Casa de las Culturas, Av. Patria y 6 de diciembre con un costo de $5.

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Autoras

Daría #LaMaracx

Escribe para no olvidar. Le obsesiona la sexualidad y los hombres. Grindera 24/7 porque el deseo no se reprime.